viernes, 25 de septiembre de 2009

Saber perder, David Trueba


Sylvia cumple dieciséis años el día en que comienza esta novela. Para celebrarlo organiza una falsa fiesta que sólo tiene un invitado. Horas después sufrirá un accidente que significará su entrada en la vida adulta. Su padre, Lorenzo, es un hombre separado que trata de superar el abandono de su mujer y el fracaso laboral. Ariel Burano es un joven jugador de fútbol que deja Buenos Aires para fichar por un equipo español. Con su superdotada pierna izquierda, será cuestión de tiempo que el estadio coree su nombre. Y tiempo es lo que no tiene el anciano Leandro, que vive en esa época donde casi todo se derrumba. Éstos son los cuatro personajes principales de Saber perder. Con las relaciones entre ellos se trenza un relato de supervivientes, de poderosa pegada narrativa y rico en matices. Una mirada capaz de extraer humor y emoción en cada curva del camino, pero que reivindica, por encimade todo, la maravillosa aventura de vivir.

El catolicismo explicado a las ovejas


Juan Eslava Galán
Similitudes con el cristianismo
Zaratustra: en el año 1200a.C nación de una virgen en Bactriana, hoy Afganistán: lo bautizaron en un río, asombró a los sabios por sus conocimientos, retirado al desierto lo tentó el demonio, recibió una revelación de Dios y predicó una nueva religión, el mazdeísmo, cuyo libro sagrado, el Avesta ( la Palabra), explica la existencia de dos dioses enfrentados el Bien y el Mal.
Auxiliado por doce discípulos predicó el mazdeísmo al tiempo que obraba milagros, curaba enfermos y resucitaba a los muertos. Cuando murió, sus fieles lo conmemoraron en banquetes rituales bajo la denominación de " la Palabra hecha carne".
El mazdeísmo inspiró sucesivamente a las grandes religioes monoteístas.
Creían en la primera paraje humana, en el Diluvio Universal, en el Arca que salvó a una pareja de animales de cada especie, en el Cielo, en el Infierno y en el Juicio Final.
El mazdeísmo inspiró el mitraísmo, uno de los cultos religiosos vigentes en tiempos de Jesús